El sacerdote parado apoyado contra una pared de la sacristía. Retorciéndose a plenitud, regocijante, vigorizándose hasta rezando unas plegarias igualmente pidiéndole al Señor que lo proteja también no guíe por el buen camino de la tentación como del mismo diablo que está encarnado como presente especialmente protagonizada por la misma Yessenia que nuevamente llego a visitar al sacerdote porque está pecando y no aguanta su cargo de conciencia de ser toda una débil por la carne inclusive metiéndose hasta buscando lo que está quieto estando felizmente casada con esposo y un hogar maravilloso sucumbiendo al sexo y a las cochinadas que implican e involucra esto que le está haciendo como perpetrándole en la misma persona del sacerdote.

Masturbándolo y sacándole leche y paja al mismo sacerdote que queda vencido como satisfecho hasta bañado en pleno sudor por tanto esfuerzo y reacciones manifestada por tanta cosa que le obligo hacer la misma Yessenia físicamente hambrienta rompiendo en llanto hablándole he caído en penitencia hasta cometí otra vez pecado es que no puedo controlarle, ni resistirme, ni aguantármela ni tampoco contenerme ya que soy una viciosa hasta adicta y co-dependiente de las buenísimas como ricas hasta sabrosísimas vergas cabronas de ustedes los hombres. Entonces el sacerdote la incorpora al tomarla de los brazos diciéndole hija no tienes compostura estás penando siempre acompañado del maestro Lucifer quién te compro tu alma desde que naciste eres una manzana podrida hasta que mueras no iras al Cielo sino penaras el resto de tus días en el pleno infierno te lo aseguro rompió Yessenia en llanto al llorar interminablemente al consolarla y abrazarla al mojarle toda la sotana especialmente sus hombros del mismo sacerdote en la sacristía calmándose y resignándose le agradece y se retira al despedirse del sacerdote la misma Yessenia tomando camino y dirección a la misma universidad ya que tiene que trabajar al mediodía al tener las horas contadas y los minutos acertados………………………………………………………