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Categoría: Incestos

Sucedió de golpe -2

Muy buenas a todos, aquí vengo con la segunda parte del relato del golpe de mi hijo. Si no lo han leído les recomiendo leerlo pues de lo contrario no entenderán varias cosas.



Me encontraba en mi habitación viendo la televisión y sabiendo que en la otra habitación mi hijo estaría masturbandose para calmar el dolor. Pensé que no lograría conseguirlo y que me llamaría así que estuve un rato esperando pero no oí nada y me quedé dormida.



A la mañana siguiente desperté temprano y lo primero que hice fue ir a ver a mi hijo si estaba bien. Cuando entré a su habitación lo encontré despierto el también lo cual era raro.



- Ya estás despierto?- Mejor dicho no he podido dormir en toda la noche. - Porque?- Lo he intentado un montón de veces pero no lo he conseguido y me ha dolido muchísimo, tanto que no he podido dormir. - Y porque no me has llamado?- Porque no lo entiendo mama. No entiendo cómo no soy capaz de hacerlo solo. Cuando estés trabajando como lo haré? Soy un inútil. - No digas eso cariño. Mira esto sólo serán unos días. Una semana como mucho. Serán 2-3 veces al día depende del dolor. En principio diría 2 pero si te duele serán 3 así aliviamos el dolor. Lo haré yo que soy tu madre y te cuido desde que naciste pero cuando yo esté en el trabajo hay mucha gente que le encantaría ayudarte. Esta tu abuela, la vecina Lucía que esta semana se que no trabaja las tardes, está también la vecina Marisa...- Mama que la vecina Marisa tiene 70 años!- Te recuerdo que Marisa tiene 63 y además fue enfermera así que un poco de respeto. - Pues si no puedes tú prefiero que sean Lucía o la abuela, Marisa me da un poco más de corte. - Esta bien. Hoy probaremos 2 veces. Una ahora y otra antes de dormir y si vemos que no es suficiente mañana yo te ayudaré por la mañana y por la noche y Lucía o la abuela te ayudarán por la tarde. - Vale me parece bien. - Bueno entonces empecemos, bájate los pantalones y calzoncillos. Así hizo mi hijo y dejó al descubierto un pollon tremendo que solo recordaba haberle visto a mis hermanos. Solo que este estaba muy rojo e hinchado por el golpe.



Estaba en reposo así que aproveche para coger la crema y poner un poco de crema sobre el tronco y otro poco sobre mi mano y empecé a masajearla. Al cabo de unos minutos el pene de mi hijo seguía en reposo lo cual me pareció extraño. - Si no se te pone dura no te correras y te seguirá doliendo. - Es que con la situación y la presión no se pone dura. - Relájate quítate la presión. Yo me voy a quitar la camiseta a ver si así se te alegra la cosa al ver mis pechos. Y así fue, al ver mis grandes amigas el pene de mi hijo no tardó en crecer y en ponerse duro. - Ahora está mucho mejor para ti y para mí jaja. La crema ya estaba bien esparcida por todo el pene así que solo quedaba masturbarlo.



Sentía que no estaba muy lejos porque empezó a respirar más fuerte y a soltar pequeños gemidos. Así pues se corrio sin avisar. Se corrio de manera abundante, varios chorros pararon en mi cara, otros en mis tetas y el resto entre la cama y mi mano.



- Lo siento mamá no he podido avisar. - No te preocupes cielo me iba a duchar de todos modos. Te sientes mejor?- Mucho mejor. - Pues así te sentirás cada vez que te hagan el masaje. Bueno me voy a la ducha luego te toca a ti.



Le hubiera propuesto una ducha juntos encantada pero con la situación y antes semejante pollon y corrida me había calentado y necesitaba aliviarme así que cogi un juguete que tengo y me fui a la ducha a aliviarme.



No tarde en llegar al climax pues en mi cabeza aún estaba la imagen del pollon de mi hijo y en mi cara su leche.



Probé un poco con la lengua me encanto el sabor y a los pocos segundos me corri.



Después de sentirme ya mejor terminé de ducharme, me sequé y salí desnuda a  la cocina a preparar el desayuno.



Iba desnuda por el pasillo y oí a mi hijo hablar así que pensé que hablaba por teléfono y no le di importancia. Al llegar a la cocina me encontré con Marcos, un amigo de mi hijo.



- Ho... Ho... Hola señora.



- Hola Marcos que tal?



- Yo... Bien gracias.



El pobre no podía evitar mirarme los pechos así que actúe con normalidad y puse la leche a calentar y el pan a tostarse. –



 Cuando has llegado?



-Esto... Hemos llegado hace 10 minutos, estaba usted en la ducha y Dani nos abrió.



- Ah no has venido solo?



- No, ha venido ta... También ha venido Carlos. Está con Dani y... Y... Y yo vine a por agua.



- Ah pues sírvete tranquilo. Seguro no quieres tomar nada más?



- No no gracias acabo de desayunar. Bueno esto mejor voy a ver a Dani- Vale. Ah y gracias una vez más por haber traído a Dani al hospital. Te debo una así que si me necesitas para cualquier cosa me avisas. Cualquier cosa vale?- Lo que sea?- Lo que sea- Vale gracias. Se fue y decidí ir a mi habitación a vestirme. Deje a mi hijo con sus amigos jugando a la play y me fui al hospital a trabajar. Tuve varios pacientes y cuando estaba cerca de acabar vino Lucía a mi consulta. - Que tal guapa?- Bien y tú Lucía?- Bien. Como está Dani?- Mejor. Esta mañana tuvo el tratamiento y mejor. - Tratamiento? - Te explico. Y le expliqué lo que había hecho con mi hijo esa mañana. - Y te quiero pedir un favor. Sé que esta semana no trabajas por las tardes.



Puede que a Dani le duela así que si necesita ayuda solo estáis tú y su abuela. Te importaría hacerle lo que le he hecho esta mañana?- Claro mujer lo que haga falta por ti. Pero a ti no te molestará que le haga una paja a tu hijo?- Mira Lucía tu marido un día vino a mi consulta a por una revisión. Te acuerdas cuando me lo enviaste porque le dolía el abdomen?- Si, fue hace unos meses.- Exacto.



Bueno pues en realidad le dolía un poco más abajo, le dolían los testiculos y el pene y dice que le hacía daño esa parte al correrse. Le hice unas pruebas y una de esas pruebas es una paja. Así que le hice una paja a tu marido. Fue por razones médicas no te engañó ni nada así que no tengas dudas en hacérselo a mi hijo porque yo ya se lo he hecho a tu marido y ya he tenido el pene de tus hijos en mi mano cuando venían a consultas. Por razones médicas claro



- Manuela cariño tú puedes hacer lo que quieras confío en ti, podrías incluso follarte a mi marido no diría nada guapa. Bueno pues si dices que no te molesta yo le ayudo encantada. - Eres la mejor amiga del mundo. Gracias. Te avisaré cuando te necesite. - Perfecto. Pasó el resto del día entre paciente y paciente y cuando volví a casa me encontré con Omar, un chico marroquí y su madre Fátima en mi casa. - Hola Fátima que tal?- Hola Manuela bien y tú?- Muy bien gracias. - Toma, te traigo estos pasteles que te gustan- Oh muchas gracias! Sabes que me encantan los dulces de tu país. - Si, por eso los traigo jaja. Como esta Daniel? Omar me ha dicho el problema que ha tenido. - Pues está mejor, aún le duele pero está mejor. - Ah bien bien. Manuela te quiero pedir un favor si puede ser. - Claro. - A Omar tiene un problema. Sabes nosotros en Marruecos hacemos eso al pene de los hombres no sé cómo se llama.- La circuncision?- Eso!! Y Omar ahora tiene un problema. No sé qué es pero esta roja la cabeza y casi azul. - Azul? Será que la sangre no circula bien. Quieres que lo vea ahora?- No no ya lo he visto yo esta mañana y esta azul pero él no va a querer enseñarla aquí. Te puedo pedir 5 minutos mañana en el hospital? - Claro mujer, cuando quieras pasa y si no tengo a nadie lo miro. - Pasare a las 10 vale?- Perfecto. - Gracias amiga. - Gracias a ti por los pasteles. Se fueron los dos y me quede a solas con mi hijo, me cambié de ropa, me puse cómoda, solo llevaba puesto un tanga pues en esa época hacía calor. Cenamos y vimos una película de acción en el salón y llego la hora de dormir. - Bueno hijo tengo sueño y mañana me espera un largo día. Que te parece si empezamos?- Vale - Antes de nada que tal el día? Te ha dolido?- Un poco si. No tanto como anoche pero me ha dolido- Bueno pues mañana pasará tu abuela o Lucía y te ayudarán vale?- Vale. Le bajé los pantalones a mi hijo y vi que no llevaba calzoncillos así que me encontré cara a cara con su polla ya dura. Salió disparada y me golpeó en la cara. - Mira que te parece si dejamos la crema esta noche y usamos otra cosa?- Que cosa?- Esto. Dije yo metiéndome su polla en la boca.



Hacía mucho tiempo que no tenía una polla en la boca y más un pollon así, desde mis hermanos. Empecé a lamer ese tronco hinchado,  di unos lengüetazos y mordí suavemente la cabeza, mi hijo cerró los ojos del placer así que empecé a chupar mientras con mi mano jugaba con sus huevos.



Me metía esa polla hasta donde me entraba pues no hay boca en el mundo capaz de abarcar semejante manguera. Sentí a mi hijo cerca así cogi sus manos y las puse en mis tetas y empezó a acariciar y pellizcar mis pezones. Me estaba mojando cuando siento un golpe en mi garganta, luego otro igual de fuerte y otros más suaves llenándome la boca. Trague todo lo que pude y el resto bajo a mis tetas. - Wow mamá eso ha sido tremendo. - Tu polla es muy buena. - Tu boca también. - Estas mejor?- Mucho mejor. - Bueno pues ahora te vas a la cama te pones un poquito de pomada y la dejas ahí y te duermes vale? - Vale- Yo también me voy a dormir que mañana me espera un largo día...



Continuará PD: gracias a tod@s por sus mensajes. Un beso, Manuella


Datos del Relato
  • Categoría: Incestos
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