Estamos yo y mí chica colombiana en mí almacén acostumbrado y habitual adonde acudo y entro hasta llego para comprar los atuendos de ejecutivas universitarias para mi prostitutas colombianas hoy pro hoy. En donde estoy mostrandole en persona cómo en vivo y a todo color los diversos modelos de faldas azul oscura de oficina de talla mediana es decir 8 a Melisa, en que no espera para meterse en los vestidores que ahi mismo se baja y quita el jeans que para mi fascinación no carga para nada hilo dental al meter los pies y subirselo parejamente públicamente ante mis propias narices cómo ojos tanto de mí cómo de las personas que se encuentran ahí inclusive de las vendedoras que se cierra el botón y subirse el zipper. Bueno ahora estoy mostrandole las variedades de saco, beliser, blusas y camisas que venden aquí en que se enamora al instante de una blusa de mnaga corta fresca y liviana en material en que no lo piensa ni aguarda al meterse al vestidor en que se sube y quita el sueter que para mi sorpresa no carga para nada sostén al ponersela cómo si nada parecido a que nos encontraramos en su propia habitación del mismo prostibulo de talla mediana de espalda y cuello es decir 8 en que se la abotona al dejarsela fuera de la misma falda azul que lleva puesta ahorita mi chica colombiana Melisa que me dice compramela y es adecuada y apropiado para ir con el abogado hasta salir y trabajar en que vuelve a desnduarse completamente ante mis narices y ojos mí chica colombiana Melisa para ponerse su sueter con su jeans y salimos con su atuendo comprado por mí y mucho más esa mañana que la lleve a mí almacén favorito y acostumbrado donde compro los atuendos de ejecutiva universitaria para mis prostituta colombianas en que entre nosotros no me cobran el 7 por ciento en estos atuendos de oficina que compro a mis diversas prostitutas colombianas hoy por hoy.