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MI HERMOSO CUÑADO

Mi cuñado es un hermoso macho, es muy desprejuiciado y liberal, en verano a veces se pasea por la casa en calzoncillo o directamente desnudo, no tiene hijos con mi hermana, así es que no tiene que ser recatado en casa, en realidad no es recatado en ninguna parte. Cuando vamos a la playa usa zungas muy pequeñas, y parece disfrutar que todos lo miren, como tiene un cuerpo hermoso, puede darse el lujo de andar casi desnudo porque sabe que calienta a todo el mundo. Mi hermana no le da importancia, ella tampoco es muy conservadora que digamos, en general mi familia es bastante liberal en muchos sentidos sobre todo en materia sexual. Mi padre ha engañado muchas veces a mi madre y ella también aún así siguen juntos, siempre he sospechado que ambos han estado en tríos y otras cosas, de echo una vez encontré un papel que contenía la dirección de un club swinger en la habitación de ellos, no dije nada.
Dentro de todo yo era el más conservador, soy católico practicante por lo que me cuido mucho de no cometer actos impuros. Pero mi cuñado puebla mis sueños, lo deseo con todas mis fuerzas. Hace cosa de una semana atrás hicieron una fiesta en casa de mi hermana, todo era baile y risas, mi cuñado se paseaba de acá para allá y de pronto se agarraban a besos con mi hermana y él tocaba sus nalgas o sus pechas descaradamente, reían sin darle importancia. En algún momento mi hermana salió a fumar al patio y mi cuñadito siguió bailando, llegaron unos amigos suyos, eran compañeros de trabajo y se pusieron a bailar junto a él, poco a poco el grupo comenzó a bailar entre ellos, y pude ver como un tipo rubio al que no conocía abrazaba a mi cuñado, lo atraía contra él y sus manos acariciaban su espalda, los demás reían y seguían bailando y moviéndose de forma sugerente. Vi claramente como el tipo rubio besaba a mi cuñado en el cuello, ambos reían y luego mi cuñado tomó la mano del tipo rubio y la puso sobre su paquete. El tipo rubio se notaba que estaba muy caliente, sobaba el paquete de mi cuñado y lo besaba en el cuello, los demás amigos se reían mientras tonteaban entre ellos. Mi hermana entró y se metió en el grupo a bailar.
No pude seguir mirando y me fui al baño y me pajeé como loco, no había dudas de que mi cuñado provocaba situaciones con hombres. Pasaron los días y un domingo llegó mi cuñado a casa nuestra, nos encontrábamos mi padre y yo. Se saludaron afectivamente, mi cuñado andaba en pantalón corto, un pantalón muy corto que resaltaba sus piernas gruesas, peludas de deportista, complementaba con una polera ajustada que marcaba sus músculos y dejaba salir un manojo de pelos de su pecho. Yo lo veía y me calentaba de inmediato. Se pusieron a conversar y yo me fui a mi habitación, me puse a mirar algo en tv. para relajarme un poco y no volver a pajearme pensando en ese pedazo de macho que estaba en casa, pasó un rato y decidí ir por un vaso de agua. Fui hasta la cocina y no se muy bien por qué, pero no entré sino que sigilosamente me acerqué para ver que pasaba ahí, me puse en un lugar en el que podía mirar sin problemas hacia adentro, pero que no me podían ver a mí. Mi cuñado y mi papá conversaban muy juntos, se reían, pero lo que me llamó la atención y me puso caliente a mil, es que mi papá mientras la hablaba a mi cuñadito no le quitaba las manos de encima, su manos acariciaban las piernas peludas, luego le tiraba pelitos del pecho, metía sus manos bajo la polera y acariciaba su pecho. Mi cuñado no lo rechazaba de plano, se notaba que no estaba incómodo, sino que seguía aquel juego de muy buena gana.
Mi padre metió una mano entre el pantalón corto de mi cuñado, me estremecí al contemplar aquello, seguí pegado a la pared mirando con más atención. Se besaron, mi cuñado y mi papá se estaban besando en la cocina que calentura me consumió en ese momento y saqué mi verga del pantalón comenzando a pajearme. Ahora mi padre metía sus manos en las nalgas de mi cuñado, se besaban con desesperación, mi cuñado también le metía mano a papá y de pronto se arrodilló, sin poder ver muy bien, porque quedaba de espalda a mí, pero no había que ser un genio para darse cuenta que mi cuñado estaba chupando la verga de papá. No puede más y me corrí allí mismo, luego me fui a mi habitación.
En otra ocasión me fui a casa de mi cuñado con mi hermano menor, él no tiene ninguna gracia, según yo, es un adolescente que pasa todo el día en el celular o con su chica. Mi hermana tenía que salir así es que nos quedamos mi hermano, mi cuñado y yo. El nos invitó a mirar una película a su habitación, sobre la cama comenzamos a mirar la tv. Mi cuñado estaba en medio de los dos, yo moría de ganas de tocarlo, estaba caliente, sin embargo no me atrevía a nada, estaba como momia mirando la película. En cambio mi cuñado y mi hermano pequeño comenzaron a juguetear, se pellizcaban, se hacían cosquillas aquí y allá, sin dar menor importancia a que yo también estaba ahí. Mi cuñado se sacó la polera quedando sólo en pantalón corto y mi hermano también se quedó sólo en jeans, ya no prestaban atención a la película, sino que se entrelazaban, se toqueteaban por todas partes, mi hermano le daba palmadas en el trasero a mi cuñado y este le mordía suavemente la oreja. Yo no podía creer lo que veía, pero estaba ocurriendo ahí, a mi lado.
Se notaba demasiado que ambos ardían en calentura, mi hermano gemía mientras se montaba sobre mi cuñado y se restregaba sobre él, sin dar una señal de recato mi cuñado le besaba el cuello y le decía - qué rico estás Jorge -. Mi hermano se reía y noté como le metía mano agarrándole la verga, lo estaba pajeando!! A mi no me notaban, no me prestaban importancia. Salí de la cama y me fui al comedor, desde ahí se escuchaban los gemidos. Después de un rato largo salió mi hermano y me dijo - vámonos a casa ya terminó la película - lo quise matar por su mentira. Olía a macho, incluso tenía una gota de semen pegada en la cara cerca de los labios. Lo miré con odio y nos fuimos a casa.
Llegó el verano y mi cuñado propuso que nos fuéramos toda la familia a la playa. Arrendamos una casa y nos instalamos cerca de la playa, papá y mi hermano andaban siempre pegados a mi cuñado, incluso a veces delante de todos mi papá le daba una palmada en el trasero a mi cuñado o mi hermano lo besaba en la mejilla casi en los labios.
Un día estábamos todos en la playa y mi hermana con mi mamá conocieron a unos hombres que les invitaron un trago. Por la tarde ambas invitaron a esos hombres a casa, allí pusieron música y había alcohol y todos bailaban, mi hermana con mi mamá bailaban de forma sensual entre los desconocidos, parecían rameras, mi padre, mi cuñado y mi hermano les decían cosas y las animaban a ser más osadas. En un momento mi madre se abrió el vestido mostrando los senos, todos rieron y uno de los hombres le tomó un pecho a mamá y comenzó a chuparlo. Así los cuatro comenzaron a tocarse y desnudarse.
Mi padre y mi hermano besaban y acariciaban a mi cuñado, se turnaban para meterse la verga de mi cuñado en sus bocas, luego mi hermana se sentó sobre mi cuñado y se tragó el miembro en su vagina mientras mi padre chupaba el miembro de mi hermano. Yo estaba en un rincón, no sabía que hacer. Todo era gemidos de placer, después de un rato mi cuñado chupaba la verga a uno de los hombres que habían conocido en la tarde, mi padre le metía la lengua en el culo, mi hermano metía su miembro en la boca de mi hermana y mamá se balanceaba en la verga del otro hombre.
Después de aquellas vacaciones me fui a estudiar fuera del país. Estuve dos años fuera y regresé por breve tiempo a casa. Nada había cambiado, mamá y papá estaban juntos como siempre, mi hermano apegados a ellos como siempre. Me hicieron una fiesta antes de volver a Europa, era una fiesta familiar, o sea una orgía entre todos. Esta vez no me quedé en el rincón sin saber que hacer. Apenas vi a mi cuñado me abalancé sobre él y le di un enorme beso en la boca. Mas tarde chupaba su miembro con desesperación, después me senté en él y moviéndome con ansias le saqué toda la leche que me inundó mi interior. Así estuve con mi cuñadito mucho rato, lo penetré, me penetró, nos quedamos con nuestras leches chorreando por las bocas. Le pedí a papá que me sacara fotos porque quería llevarme el recuerdo de mi cuñado conmigo.

 
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