Al poco de haber llegado y sentado en una de las bancas afuera de las escalinatas de la sede universitaria, donde yo soy administrativo universitario hoy día. Vé entrando por uno de los portones nada menos a la hermosa de mi compañera y amiga Laly; qué vestida con falda de su uniforme de administrativa universitaria, con blusa roja de manga corta, qué llevá y carga su saco doblado en su brazo, con medias oscurasm y con sandalias negras pálidas.

Camina hacia mí. Al sentarse en la banca al lado mio, me saluda, y me mira sonriéndome completamente; me pregunta Laly ¿Cómo estuvo, además pasaste también descansaste tu fin de semana...?

Yo le réspondo con franqueza, la miro a los ojos de Laly, sí tranquiló en mi hogar; igualmente piensó yo. Qué tú también hiciste lo mismo, pero acompañado de tu novio recuperando hasta teniendo sexo, a tutiplén por doquier es mi húmilde pensar hasta razón.

Laly se pone sería conmigo. Y mé contesta, no en absoluto ya que se encuentra viajando por su trabajo, desde la semana pasada; precisamente este mismo día pero hace 7 días atrás. Aburrida solamente, ocupada de lavar mi ropa, y limpiar mi casa en que no tenia, ni me alcanzo el tiempo, de a vaina fuí a comprar al supermercado abasteciendome para esta semana y el resto del mes.

Me hubierás llamado para acompañarte y estár contigo, atendiéndote amorosa hasta sexualmente en tus necesidades intimas, apasionadas, y por supuesto, jugariamos eróticamente lo qué tú quisieras. De fantasías que se ven en los videos pornograficos, espero que no seas una beata cómo aquellas señoras religiosas de mente sucia, estrecha, ignorantes, y prejuiciosas de hoy día. Laly, sonriente me pone su mano en la mia que me acaricia, sí lo tendré presente cómo en cuenta para la proxima, y recordaré telefonearte; para qué estemos asolas como juntos. Y por supuesto, soy una mujer inteligente y abierta de criterio amplio, finalmente estoy libre para hacer recreaciones de esos videos catalogados XXX y pornograficos contigo siempre; siempre y cuándo, te y me protegas con condón. Qué no quiero un embarazo, ni un hijo no deseado de nuestras calenturas igualmente acostadas, sobre todo. entendiéndonos más allá, de lo persona como laboral y siendo amigos cómo lo somos hoy día me mira fijamente Laly.