~~Hola!!! Espero que se acuerden de mi!! Estuve muy atareada con mis estudios en la Facu y además me hice un viajecito de una semana a las Termas del Dayman, en el Dpto. de Salto, Uruguay, en la deliciosa compañía de Laurita a efectos de broncearme un poco ,previamente a mis vacaciones en Florianópolis para encontrarme tostadita y hablando un portugués muy aceptable con Úrsula, el amor de mi vida. Espero que sepan quién e Úrsula, de lo contrario , por favor, remítanse a mis relatos anteriores en la sección de los colaboradores más creativos de Marqueze. Ahí cuento cómo la conocí el año pasado. Tuve, en mis dos paseos, experiencias por demás interesantes que merecen la pena ser relatadas, pero que lo pienso hacer con más tiempo en futuros envíos a esta hermosa página que es Marqueze. Mi último relato era la 2da. parte de lo que me contaron mis papis, la semana siguiente a mi iniciación sexual y que trata de la primera experiencia swinger de ellos de eso hace ya algunos años. Ya ha corrido mucha agua bajo los puentes desde ese momento y sucedieron muchas cosas deliciosas que relatarlas llevaría mucho espacio y tiempo. Mi intención es hacerlo más adelante, lo que pasa es que a las experiencias vividas por ellos se unen las actuales mías y disfruto más relatando las mías ya que al hacerlo me parece que las vivo nuevamente lo que contribuye a excitarme muchísimo. Pero voy a terminar de contarles de la mejor manera posible lo referente a la primera experiencia swinger de mis papis.. Tuve que leer nuevamente lo que había escrito anteriormente porque había perdido el hilo del relato. Había dejado en el momento en que Pablo , el marido de Renata y Roberto mi papi, vinieron del dormitorio con las pijas duras con la intención de sodomizarlas y se encontraron con las dos a las caricias y los besos en el sofá del living.
G Papi, contame como fue que sodomizaste a Renata. R Ahora que siga Mariana, ya que antes de eso ellas estuvieron bastante ocupadas. (Mi mami se sonrió picarescamente) M Bueno Gabrielita. nosotras estábamos en el sofá charlando y de a poco nos empezamos a calentar y a besarnos. Renata como te dije, estaba buenísima, con una cara y unas tetas muy lindas, aparte del cuerpo que era fabuloso. Yo me daba cuenta de que ella me tenía ganas y, te confieso, que yo tenía tantas ganas como ella de empezar a revolcarnos juntas. Estábamos en lo mejor cuando aparecen los dos completamente desnudos y con las pijas hechas unos garrotes. R Sí, me había puesto de acuerdo con Pablo en que yo le comía el culito a la mujer de él y él a Mariana, ya que sabíamos que a las dos les iba a gustar la idea. Y nos encontramos a las dos besándose y acariciándose en el living. M Pablo se sentó a mi lado y comenzó a masajearme mientras me besaba con Renata ya que como te imaginás cuando vinieron ellos no les dimos bolilla y seguimos con lo nuestro. R Yo me senté al lado de Renata y como estaba reclinada sobre Mariana tenía el muslo y la nalga derecha un poco levantados. Le empecé a acariciar la nalga por debajo de la tanga y al mismo tiempo deslicé mi dedo por la raja hasta encontrar el ano que estaba empapado con sus jugos. M ¡Vamos para la cama, Mariana, que estoy recaliente, me susurró Renata, se levantó y se encaminó hacia el dormitorio!. Me levanté y la seguí. Iba delante de mí. Sin dejar de caminar dejó caer el salto de cama en el suelo. ¡Qué buena que estaba de tacos altos, medias, y tanga! Yo también tiré el salto de cama al suelo. Cuando llegamos al dormitorio ella se acostó en el medio de la cama y levantando las caderas, apoyando uno de sus pies en el colchón se sacó la tanga. La visión de su concha, sus soberbios muslos abiertos de par en par hicieron que yo no perdiera más tiempo, me saqué la tanga sin dejar de mirarla a los ojos y me acosté encima de ella. ¡Qué sensación deliciosa es sentir el cuerpo de una mujer hermosa debajo de una con nuestras piernas, nuestros vientres, nuestros senos, nuestras bocas en íntimo contacto. Deslizaba mi concha en su muslo mientras nos besábamos y acariciábamos nuestras carnes apasionadamente. RT ¡Vamos a chuparnos! M. Sabía lo que ella quería porque había vistos muchos videos porno de mujeres haciendo el 69. Me ubiqué rápidamente en la posición requerida., La visión de su concha depilada, su vulva roja, mojada y sus muslos abierto de par en par hizo que sintiera una especie de mareo. Me abracé a sus muslos mirando con deseo su invitante cajeta. G Ay, mamá. cajeta!!! M Lo que me pasa es que me empiezo a acordar me caliento, y cuando me caliento me pongo un poco ordinaria. R Vos te calentás y yo con este culito delante mío ¿cómo crees que estoy? M No te hagas ilusiones que dentro de una rato me toca a mi . . ¿o querés que me ponga en contacto con alguno de nuestros amigos? G Dale mamá no le des bolilla y seguí. M Ella se aferró a mis nalgas, sentí como movía su cabeza entre mis piernas y de repente su lengua como un estilete en mi clítoris me hizo saltar. ¡Qué delicia!!!. Perdí el control de mis actos . Comencé no a besar ni a lamer sino a chupar su concha con total inexperiencia pero con mucha ansiedad, con muchas ganas. En la habitación se sentía el ruido de mis chupadas desesperadas en aquella concha deliciosa junto con los quejidos y suspiros de Renata. Pablo y Roberto se manoseaban las pijas sentados en el sofá. A partir de ese momento me di cuenta por qué a la mayoría de los hombres les encanta chuparnos la concha. ¡Es delicioso!! G ¡Ay, mamá chuparse una pija y tragarse las leche también es fabuloso. ¡No me digas que no!! M Bueno. sí..pero en aquel momento,,,¡qué querés que te diga!. G Dale. seguí.
(La pija de mi papi la sentía otra vez bien parada entre mis muslos, pero yo sabía que a quien iba a tener que coger en ese momento, era a Mariana. Eso no me importaba porque me gusta masturbarme mientras ellos hacen sus cosas) M. Estuvimos casi media hora revolcándonos, tuvimos un orgasmo simultáneo. Quedamos sudadas, saboreando ese momento de placer y comenzamos nuevamente a besarnos y a acariciarnos. Nos habíamos olvidado de nuestros machos, pero ellos no de nosotras. Se pusieron de pie y se acostaron a nuestro lado. Pablo detrás de mí y Roberto detrás de Renata. Al sentir el cuerpo de Roberto detrás de ella , Renata giró parcialmente su cuerpo y se puso boca arriba, sonriéndole maliciosamente. Yo hice lo mismo con Pablo. Seguí vos Roberto. R Hace tiempo que pasó esto pero lo recuerdo como si fuera ayer. Ella se puso boca arriba, mirándome sonriente y aferró mi verga comenzando a masturbarme suave y deliciosamente. RT Qué linda pija que tenés y qué dura que está!!!! R Nos dejaron calientes. .son dos yeguas!!!! RT ¿Te parece? ¿Qué tenés ganas de hacerme? R Romperte el culito. RT Llegás tarde, Pablo me lo rompió hace tiempo. R Si ya sé, me lo dijo , pero lo tenés divino y también me dijo que te gusta que te cojan por el culo. RT Si me encanta, pero hoy con dos machos quiero hacer una cosa que nunca hice, si es que Mariana me deja.
M Y. ¿qué querés hacer? RT Que me cojan dos hombres a la vez, uno por adelante y el otro por atrás. M ¡Guauuu! Eso sí que debe de ser bueno. RT Bueno que me cojan los dos, que no me acaben y después que te lo hagan a vos también ¿querés? M ¡Sí, sí, quiero!! ¡¡Cómo no voy a querer!!! Vamos a chuparlos un poquito a los dos y que ellos nos chupen la cola así quedamos todos prontos. R Esa noche , sí que te pusiste bien puta, Mariana. M Tanto me provocaste, tanto me buscaste hasta que me encontraste y el tiempo me demostró que fue bueno para los dos. R Mejor no pudo haber sido.
M Bueno, nos pusimos las dos de costado haciendo un 69 y empezamos a chuparnos la concha mientras que ellos nos chupaban el culo. Luego de unos minutos Pablo se puso acostado boca arriba y Renata arrodillada con las piernas abiertas delante de él tomó su verga , la acercó a su vulva y dejó caer el peso de su cuerpo quedando completamente ensartada en su linda pija. Estaba divina lanzada completamente y dejándose llevar por la lujuria. Tu padre, ese degenerado que tenés detrás tuyo se arrodilló detrás de ella, pero antes me la puso en la boca para que yo se la chupara y la babeara bien a efectos de lubricarla lo mejor posible. Me arrodillé delante de las caderas de Renata para ver de cerca como su ano iba a llenarse con la pija de Roberto. No cabía duda de que estaba deseando ser sodomizada. Sus gestos impúdicos mirando a Roberto, sus manos aferrando sus nalgas y abriendo su raja con la yema de los dedos al costado de su esfínter procurando abrirlo al máximo a efectos de facilitarle la penetración así lo demostraban. RT Metémela vos Mariana. M Tomé esa pija que tenés ahora entre las piernas y se la fui a poner a la entrada del ano. Pero su culito estaba tan tentador, palpitando como un corazón que no pude resistir la tentación de hundirle mi lengua lo más adentro que pude. ¿Te gusta , puta? le pregunté. RT Sí me gusta, pero quiero que me claven, por favor!!! M Puse el glande de Roberto bien ubicado a la entrada. Este animal estaba tan caliente que de un sólo empujón se la metió hasta la mitad. ¿Te gusta, puta? le pregunté nuevamente. Me gustaba insultarla!!! RT Sí, me gusta.!!! me gusta!!! quiero más!!! M ¿ Más qué?. puta!! ¿ Más qué? . decime!!!!Que puta que sos!!! RT Sí. soy puta!!! puta!!! ¡¡quiero pija!!! ¡¡¡más pija!!!!¡eso quiero!¡¡aaaahhhh! ¡¡¡aaaahhh! M Roberto le empezó a dar con alma y vida, yo tenía miedo de que fuera a acabar, pero se portó bien. Esperó que Renata tuviera su orgasmo. Un orgasmo brutal!!! ¡Nunca había visto a una mujer gozando en mi presencia y menos cogiendo con mi marido!! ¡Fue fabuloso!!! La dejaron a un costado como un animal lamiéndose las heridas y entonces llegó mi turno. Fue Roberto el que se acostó boca arriba y fui yo la que me ensarté en su estaca. ¡Qué calentura que tenía en ese momento. Mi concha parecía que tenía una brasa encendida en el útero, mi clítoris ardía y el ano se me contraía y se aflojaba rítmicamente esperando con hambre el pedazo de carne mojada y dura que Pablo tenía entre las piernas. Para colmo Renata hizo lo mismo que yo, se arrodilló y me hizo sentir la delicia de su lengua en mi hambriento ano. . Yo tenía experiencia anal porque a Roberto siempre le encantó comerme el culo, pero el sentir la pija de otro hombre en mis entrañas hizo que esa primera doble penetración quedara grabada a fuego en mi alma. A partir de esa noche mi alma de lesbiana, de puta a la que le gustan los machos y las orgías, se manifestó en toda su plenitud. La aquiescencia de Roberto lo hace aún más delicioso. Puedo. pudimos los dos y ahora los tres disfrutar del sexo al máximo. Pablo resultó ser un hábil cogedor, mi hizo gozar como una endemoniada con su pija en mi culo, revolviéndome las entrañas de todas las maneras posibles, al comienzo entrando y saliendo despacio, luego dándome con violencia o empujando y dejando que yo me moviera con su pija hasta el fondo. Esa primera doble penetración fue fantástica. Renata y yo juntamos nuestras caras y con las bocas abiertas esperamos la riada de leche que brotó a raudales de las vergas de Roberto y Pablo. ¡Nunca pensé que pudiera en esa primera noche de sexo compartido hacer tantas chanchadas y disfrutarlas de la manera en que las disfruté. (Todo esto relatado por mi mami agregado a nuestras mutuas caricias y al roce de nuestros cuerpos desnudos mientras la escuchábamos hizo que los tres quedáramos excitados al máximo) M Roberto, dame por el culo. Vení Gabi que te quiero chupar. Acostate abajo mío. (Yo estaba caliente y la obedecí en menos de lo que canta un gallo. Con mis nalgas apoyadas en la almohada, mis pies apoyados en la pared y mis muslos abiertos de par en par le ofrecí a mi madre como en un altar mi conchita palpitante. Su hábil lengua titilando como la de un áspid en mi clítoris me transporta cada vez que lo hace al séptimo cielo. Yo también me abracé a sus muslos, respiré profundamente por dos veces y me dispuse a gozar chupando con veneración su deliciosa concha. Vi como mi papi apoyaba el glande de su pija en el ano de mi mamá y como lentamente su verga comenzó a ser devorada por las ardientes entrañas de Mariana. Vi como mi papi la retiraba totalmente y la ponía encima de mi cara. Conociendo sus intenciones, eché mi cabeza hacia atrás permitiendo que me introdujera parte de su verga en la boca. Me dediqué a saborearla por unos minutos, pocos, sin soltar las nalgas de mi mami. Roberto se la volvió a meter, esta vez de un sólo envión hasta los pelos, haciendo que Mariana lanzara gemidos de placer. Repitió la operación de metérmela en la boca en un par de ocasiones más La última penetración fue violentísima . El cuerpo de Mariana sacudido por violentos empujones respondía de la misma manera al brutal trato a que era sometida no dejando de demostrar no obstante un placer intensísimo. ¡Que manera de gozar los tres!. Reconozco que me hubiera gustado estar en el lugar de ella. Pero tales ocasiones se presentan , por suerte , con mucha frecuencia.. En esos días Mariana tuvo su ciclo menstrual y Roberto y yo aprovechamos para hacer toda clase de locuras en su presencia. En esos momentos de intenso placer no se me iba de la cabeza cómo se debería gozar en compañía de los negros que dentro de pocos días me iban a presentar. ) /Más adelante les seguiré contando con más detalles las andanzas de mis padres anteriores a mi iniciación sexual, también en algunas reuniones en que estuve con ellos y alguna otra que contenga cosas interesantes de narrar. Lo que no me cabe duda de que les va gustar es cuando les relate los detalles de mis vacaciones en Salto, un lindo lugar, en donde conocí a algunas personas muy, pero muy interesantes. Ni hablar cuando comience a relatar las cosillas que me pasaron en Florianópolis, el reencuentro con Úrsula y con algunos amigos, unos conocidos por mi y otros no. Reconozco que no fui tan alocada e irresponsable como el año pasado. Para evitar sustos posteriores tomé algunas precauciones y hablé seriamente con Úrsula respecto a los nuevos amigos que iba a presentarme. Recibo con agrado de parte de Uds. , preferentemente parejas, e mails bien intencionados. Mi dirección Besos