Nuevamente el juego de swinger ahora con cuatro parejas realizándose en el estado de Ohio en los Estados Unidos de América; teniendo a una pareja mejicana otra de norteamericanos, la tercera conformada tanto por Blanc y su enamorado la cuarta que son españoles. Revolviendo en un vaso de champaña los cuatro anillos de las parejas que están jugando como participando altivamente del mismo swinger en un rancho a las afuera de la misma ciudad de Ohio un fin de semana de veraneo y caluroso en que corre la brisa agradable de planicie a planicie escuchando armónicamente el sonido de la misma naturaleza y por supuesto, de la quietud del área montañosa con el correr de los ríos circundantes por los alrededores del mismo rancho donde están quedándose las cuatro parejas involucradas en el intercambio. Sacando la primera argolla la mejicana que se queda y pasara la noche con el español, tocándola la segunda argolla que la saca la española quedándose con el norteamericano siguiendo la norteamericana con la argolla del enamorado finalmente Blanc con la argolla del mero mejicano que le tiro desde que los presentaron los ojos al ser lujurioso por la pinta que exhibe de falda jeans con botas negras y camisa de manga larga de vaquera al quedarle bellísimo completamente a la mismísima Blanc en vivo a todo color; parándose así las cuatro parejas de swinger despidiéndose igualmente retirándose a sus habitaciones de esta manera dando comienzo al juego del intercambio de parejas.
Metidos en la cama la mejicana con el español endemoniado como manoseador sin parar dándole durísimo por la cogida deliciosa que le está mostrando sin parar al tenerla gozando como excitadísima a la mejicana en que jadea y gime con todos los placeres también con una autoría de fascinación al quedar colmada por este por toda la velada, entonces el norteamericano besando y fornicando como los bravos de Boston en toda la vagina del a española en que entrelazándolo fuertemente los meros muslos y nalgas con una naturalidad al no dejarla ni respirar ni tomar un sorbo de aire ocultos y debajo de las sabanas de la misma cama con una efervescencia que parece está anotándole carreras como bases de cuadrangular a esta, bueno el enamorado mamándole con una brutales hasta deseado pero recontra colosal y poderoso a la orgullosa norteamericana dueña de un portentoso armamento firme, duro como cargadísimo de senos talla médium con unas tetas del carajo y unos pezones mil veces coñeras en que se le pasa y se divierte hasta disfruta chupárselo a cuerpo de reina a la misma norteamericana que lo acurruca como lo mantiene consolándolo hasta que se duerma como fuera un bebe que lo están durmiendo a su hora finalmente queda Blanc con el ardiente como ardido hasta excitadísimo también enardecido especialmente deleitado igualmente atraído por la pinta finalmente queridísimo mejicano en que pegados al desnudo le está aplicando suavecito unas merecidas y expertas hurga ditas en que la mirarlo fijamente está en un trance que se afloja todita la misma Blanc en que con su boca semi abierta de par en par con la lengua tendida sobre el labio inferior al estar recostada con una pierna doblada y la otra extendida en la misma cama expresando tranquilamente unos gemidos como jadeos al verse contorsionarse parejamente a la hurga dita que está recibiendo del flamante mejicano; al pasarse toda la noche en esto. Reunidos en el mismo lugar de la noche anterior las cuatro parejas despidiéndose al tomar sus respectivos vehículos ya en marcha Blanc le pregunta al enamorado que te pareció este fin de semana, en lo que le dice el enamorado sensacional e inolvidable pero te extrañe mucho toda la noche que estaba con la norteamericana igualmente le contesta Blanc que estaba con el mejicano en la misma cama…..