Siempre me llevé muy bien y con respeto con mi abuela que se encargaba del cuidado de la casa y también de mi. Pero todo cambió cuando una tarde que después de hacer mis tareas vinieron unos amigos del colegio y salimos a jugar fútbol por el apuro olvidé de guardar mis libros y cuadernos en mi maletín en la mesa del comedor.

Cuando mi abuela llegó de hacer unas compras los recogió y abrió el maletín para guardarlo... ohh sorpresa encontró una revista pornográfica gay que luego contaré como llegó ahí, a cada pagina que pasaba abría más los ojos era primera vez que veía a dos hombres teniendo sexo muy nerviosa y llorando guardo todo y lo llevo a mi dormitorio.

En ese tiempo estaba compitiendo con Jorge un compañero de aula por conquistar a Gaby una amiga en común y el desgraciado había puesto ese revista sin que me de cuenta porque se suponía que haría la tarea juntos esa tarde ya le había dicho a ella que le parecía medio raro buscaba de todas maneras desprestigiarme. Recién me di cuenta cuando al día siguiente ordenaba los libros y cuadernos a llevar pregunte muy furioso quien había sido todos se negaron pero luego me enteré que fue él y lo esperé a la salida de las clases.

Ya me habían contado que también le había dicho lo mismo a varias amigos del colegio, lo enfrentó y se negó igual nos agarramos a golpes hasta que vino un profesor y nos llevó a la dirección donde quedamos castigados luego llamaron a mi abuela y le dieron las quejas de regreso a casa ella estaba muy triste yo no sabía que ella había visto esa revista creía que solo era por la pelea que había tenido.

- Abuelita por favor perdóname...te prometo que no me vuelvo a pelear...

Pero ella no me contesta y veo caer unas lágrimas por sus mejillas y cuando llegamos a la casa se fue a su dormitorio y se encerró al día siguiente su mirada era diferente hacia a mi, luego me enteré por ella que le pidió consejo a una amiga que hacer conmigo para que me gusten las mujeres se sentía culpable y no quería imaginar que les diría a mi padres que habían confiado en ella para cuidarme.

Eran otros tiempos donde el sexo no se hablaba tan abiertamente como ahora y había mucha ignorancia sobre la homosexualidad, ella a sus 56 años ese tema era un tabú y no había ningún hombre de confianza para que le ayude sólo se atrevió a contarlo a su amiga

- Olga tienes que llevarlo a debutar a tu nieto para que sepa que es tocar a una mujer pero no demores porque luego tal vez sea demasiado tarde.

- Si pero no tengo la ayuda de nadie tu sabes que sólo estoy yo sola a su cuidado y tengo mucha vergüenza contar sobre esos gustos... y no quiero que nadie se enteré prometeme que esto queda entre las dos.

Para mi mala suerte Gaby ya no quería saber nada de mi y de Jorge se había enamorado de otro muchacho , me chocó bastante porque estaba muy enamorado de ella así que para olvidarla ahora salía con mis amigos al cine o a jugar fútbol eso hizo que mi abuela se preocupe más.

- ¿Porque no sales con alguna amiga a pasear? Luchito sólo sales con tus amigos búscate una amiguita yo te doy dinero no te preocupes por eso.

Sin imaginar que ella pensaba que a mi no me gustaban las mujeres, le contesté que por ahora no quería saber nada de chicas y salí rápidamente a la calle donde ya me esperaban mis amigos.

De esa conversación pasaron dos días hasta llegar a fin de semana donde fui a una fiesta era cumpleaños de un amigo de clases todo transcurria de lo mas normal hablando de fútbol y muchachas que nos gustaban hasta que llegó Gaby con su enamorado se acercó para saludarme e hice de tripas corazón y traté de actuar lo mas normal que pude y se fue a bailar con su pareja, mi amigo Carlos sabía todo así que me jaló a un costado '' Luis no es para tanto ya habrá otras mujeres vamos a tomar tengo una botella de vino guardado '' y tome varias copas hasta que emborrache y me llevaron a mi casa Carlos y Pedro.

-Al abrir la puerta mi abuela se sorprendió de mi estado y preguntó que había pasado y como ellos también estaban algo mareados le contesta Pedro que también se había peleado con su enamorada.

- Señora disculpe Ud. pero estamos mejor sin las mujeres.

Me subieron a mi dormitorio y se fueron ahí quedé sobre mi cama mi abuela entonces empezó a quitarme la ropa y en su cabeza daban muchas ideas y recordó lo que le dijo su amiga ''debe debutar ya con una mujer porque si demora mucho puede ser muy tarde‘‘.

Su mano muy tímidamente empezó a pasarlo sobre mi pijama hasta llegar por mi verga y comenzó a sobarlo hasta que de a pocos se puso duro era la primera vez que otra mano me masturbaba porque hasta ese entonces sólo lo hice yo me desperté dentro de lo borracho aún me daba cuenta de lo que sucedía.

- ¿Abuela que haces?

- No te preocupes hijito acá está tu abuelita que te quiere mucho para ayudarte sólo déjame a mi hacer las cosas.

Mi abuela Olga a sus 56 años aún conserva una buena figura de senos grandes y buen trasero algunos pretendientes tuvo después que se quedó viuda pero ella no aceptó por respeto a la memoria de su esposo y por cuidarme a mi. Mi cariño y respeto hacia ella era grande pero también la excitación que sentía en ese momento.

Su mano subia y bajaba sobre mi verga que estaba en su máxima erección yo creía que ella se sentía sola y necesitaba el calor de un hombre después de mucho tiempo y según ella me estaba convirtiendo en hombre así que nos dejamos llevar por el momento.

- ¿Te gusta hijito así que te toque?

Claro que me gustaba y quería que también se lo metiera en su boca como había visto en esas revistas porno que veía a escondidas pero no me atrevia a pedírselo pero los minutos pasaban y ya no aguanté mas y le dije.

- ¿Abuelita te puedo pedir lo que quiera?

- Lo que tu quieras estoy para acá para hacerte feliz Luchito...

Cuando le dije que me gustaría que se lo tragué me quedo mirando unos segundos pero luego comprendió que si eso era necesario para que me gusten las mujeres lo haría. Su boca fue bajando hasta que sus labios chocaron con el glande rojo y brillante ante sus ojos cerró los ojos y empezó a tragarlo de a pocos hasta tenerlo por completo en su cavidad bucal.

- Asiii… abuelita ahora chupalo como si fuera un helado... ahhh...

Ella obedeció y para sorpresa mía lo hacia muy bien su boca succionaba con una experiencia que jamás imaginé en ella sus cachetes se inflaban al tener mi verga en su boquita caliente ahora ella también lo empezó a disfrutar porque la timidez y vergüenza del inicio había desaparecido.

- Glop... glop... glop...

Era el sonido que se escuchaba en la habitación cuando salia y entraba mi verga de su boca luego le dije que quería tocar sus senos así que dejo caer a un lado de la cama su bata y por primera vez vi esas tetas grandes de pezones marrones que cogí con fuerza y jugué con ellos.

- Despacio hijito no los aprietes mucho sólo sobalos suavemente...

Hice caso a su pedido e inmediatamente sus pezones se pusieron duros, su boca subía y bajaba también por mis testículos estaba en el paraíso jamás imaginé que fuera mi abuela mi primera mujer en la vida , luego ella se quitó su calzón y se subió sobre mi y ella misma se fue metiéndose la verga a su vagina caliente y humedad ya ése momento.

- ¡¡Ahhh... que rico abuelitaaa...!!

- ¡¡Siiiiii que ricoooo se siente… ahora déjame a mi papito hacer todo…!!

Y comenzó a cabalgar sobre mi sus tetas se movían a compás de sus caderas ella tenía los ojos cerrados talvez para no ver que era su nieto querido quien le proporcionaba tanto placer que extrañaba sólo se mordia los labios para no gritar o gemir .

La cama sonaba a cada vez que iba en aumento sus movimientos de caderas de una mujer madura muy excitada pareciera que se iba a romper, hasta que mi abuela apretó muy fuerte sus piernas sobre mi y empezó a temblar miró al techo y soltó un gemido y llegó a un orgasmo sentía sus jugos sobre mi luego yo la cogí fuerte de su caderas y empiezo a darle duro a esa rica vagina hasta también eyacular adentró.

- ¡¡Aggg… que ricoooo abuelitaaaa ...!!

Ella cayó sobre mi con su cuerpo totalmente sudado y me abrazo fuerte

- Yo voy hacer que te gusten las mujeres vas a ver... pero esto será nuestro secreto.