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Categoría: Infidelidad

Viaje de entrenamiento

La ultima vez que lo hice fue ya hace bastante tiempo con una compañera del trabajo durante un viaje de entrenamiento en otra ciudad,

La verdad es que animados por la situacion morbosa de estar solos en un hotel (diferente habitacion) sin mi pareja pero sin nadie que nos conociera (Bueno al menos eso pensaba hasta que me entere que los demas compañeros de otras plantas tambien se hospedaban ahi.

La primera noche decidimos bajar a probar el jacuzzi pero ya estaba ocupado por otra pareja, asi que decidimos ir a la alberca en la cual solo habia otra persona un muchacho joven que aparentaba solo estarse relajando ahi, (despues supe que era el instructor del curso)

El hecho es que al estar jugueteando solos ahi, se le cayo un anillo que tenia en uno de los dedos de su pie, asi que la apuesta fue que si lo encontraba ella me daria lo que le pidiera, y asi fue lo encontre sin mayor problema.

Decidimos ir a nuestra habitacion y cambiarnos para pasar nuestra primera noche, yo ya habia logrado la promesa de que me diera lo que mas deseaba desde que estabamos en el trabajo, sus dos grandes senos blancos (Siempre pense que parecian dos papayas maduras listas para ser cortadas. Fuera de esto no me interesaba nada mas de ella.

Despues de tomar un baño me dirigi a su habitacion para ver si podiamos bajar a cenar o tomar algo pero ella aun no estaba lista asi que me pidio que la esperara mientras se bañaba, y asi lo hice.

Salio despues de veinte minutos de espera solo enredada en una toalla, asi que decidi cobrar mi apuesta en ese momento y le pedi que se la bajara para poder ver sus papayas maduras y poder chupar sus pezones.

me pidio que bajara la intensidad de la luz para poder estar mas comodos, al quitarse la toalla me di cuenta que en realidad no me habia equivocado, sus grandes senos eran realmente bellos y sus pezones de un cafe claro invitaban a morderlos y acariciarlos con la boca.

Su vagina era peluda pero, de un vello lacio y negro el cual contrastaba muy bien ya que su piel era blanca. Sus piernas eran delgadas pero su piel era firme lo supe cuando empeze a acariciar su entrepierna y comprobar que sus jugos estaban mojando su panochita.

Sin dejar de chupar sus pezones empeze a meter un dedo en su vagina acariciando su clitoris y embarrando sus juguitos alrededor de sus labios vaginales. Solo se escuchaban suspiros de placer por estar recibiendo mis caricias.

Me sentia en la gloria como un bebe saboreando su tetera, agarraba las dos papayas con ambas manos y las juntaba para poder saborear ambos pezones a la vez mordisqueando y lengueteando a placer aquellas carnes duras y apetitosas, nada me llamaba mas la atencion que seguir ahi jugueteando pero quize dedicar parte de mi tiempo para recorrer y conocer el resto de su cuerpo que aunque no me llamaba la atencion bien merecia recordarlo y que mejor que acariciarlo a conciencia besando mordiendo, dedeando y pellizcando cada parte que visitaba de aquel cuerpo recien descubierto.

No me cansaba de explorar las zonas que mas me excitan de las mujeres pero sin querer el tiempo volo, y en medio de aquel desenfreno me pregunto mi compañera que si yo no queria gozar, y le comente que ya lo estaba haciendo pero, me pidio que la dejara hacerme una "rusa" a lo cual le dije que mi pene no era muy prominente pero ella me contesto que la dejara que queria sacarme la leche con sus senos a lo cual accedi.

Su piel era suave, lo supe cuando empeze a sentir mi verga en medio de esas fabulosas chiches frotandose en mis huevos y la cabeza de mi verga, no pude venirme en realidad no lo deseaba mi fervor era solo sentir lo prohibido de su piel asi que deidi pedirle que me dejara frotarme en su cuerpo. (No queria que la penetrara ya que estaba en sus dias fertiles y no teniamos preservativos a la mano ni ganas de conseguirlos).

Lo que siguio fue realmente la fantasias de las posiciones de como me la cogeria aunque yo seguia con mi ropa interior solo le recargaba mi verga en su coñito y culo simulando que la penetraba ella mientras gemia solo de sentir lo duro de mi pene rozando con sus carnes en todas las posiciones imaginables.

No me la cogi, y no me arrepiento por ello solo fue un juego de caricias, solo fue realizar la fantasia de tener esos hermosos senos para mi solito.
Datos del Relato
  • Autor: navajo38
  • Código: 19952
  • Fecha: 30-05-2008
  • Categoría: Infidelidad
  • Media: 5.47
  • Votos: 62
  • Envios: 0
  • Lecturas: 1971
  • Valoración:
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