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Un hombre afortunado (35)

Hola Amigos:



Ese Domingo en verdad me sentí triste, anduve con mis hijos, buscando un apartamento donde empezar a vivir de nuevo, encontramos uno de tres recamaras en un buen barrio, liquide el anticipo y un mes mas, sin hacer contrato, ya que a mi siempre me ha gustado vivir en casas no en apartamentos, y pensando que con calma encontraría una pequeña casa para mis hijos y para mi.



El día lunes, como ya se estaba empezando a ser costumbre, me presente a mi trabajo, y la mañana se me fue rapidísimo, cuando me di cuenta ya era la hora de ir a ver a mi patrona y enfile en esa dirección…



Yolanda, me estaba esperando, muy sexy, al entrar a la casa, tenía dos copas de vino en la mano, me ofreció una y yo apure el contenido…



Ya se fue Benja…viene dentro de un mes y medio, te deja saludos y unas instrucciones de trabajo en el operativo, alcanzo a decirme y me empezaba a acariciar, a lo cual yo me negué y le dije que quería platicar con ella, que andaba muy aguitado…



Que pasa amor…problemas en el trabajo…tienes un talante muy abatido…pasa algo malo?...



Se me llenaron los ojos de lagrimas y le empecé a contar los sucesos del fin de semana, ella habría los ojos admirada…



No lo puedo creer…me decía…permíteme un segundo y se subió a su recamara…yo fui a la cantina de su casa y me volví a llenar la copa varias veces, ella bajo a los pocos minutos…bien vestida y me dijo…



Ven vamos a caminar un poco al parque aquí cercano, subimos a la camioneta y nos dirigimos a un parque cercano de tantos que hay por esta ciudad, tiene un lago pequeño y unas bancas…empezamos a caminar ella se amorro de mi brazo…



Sabes?... me dijo, no te pongas triste, ella sabe por que lo hace, cuando la conocí se me hizo una mujer inteligente, sabe lo que quiere y que bueno que fue sincera contigo y eso deberías agradecérselo, para decirte verdad y sin el afán de hacerte sentir mejor, en verdad no se por que viviste con ella tantos años, son tan diferentes, lo pude observar en la cena, tu eres un hombre completo en tu plenitud, profesional, culto, elegante, educado, ella se me hizo sin afán de hablar mal de ella, podría decirte que mas sencilla, el domingo, pensé mucho en eso, como habías podido vivir tantos años con ella…



Tal vez por que nos complementábamos, alcance a decir…



Tal vez, pero te repito, que bueno que al menos es sincera y no te engaño, tu no te mereces eso…



Le dimos varias vueltas al parque, ella de mi brazo, parecíamos dos enamorados, contemplado el sol que se ocultaba detrás de las montañas nevadas…



Vamos a cenar a un buen restaurante…y tus hijos? Preguntó



Están en un departamento que rentamos y les deje dinero para sus necesidades…



Eres un buen padre…dijo y nos dirigimos a un restaurante estilo japonés no muy lejano de ahí…



En la cena me decía…por lo económico no te preocupes…te ofrezco la casa, todo el baseman (sótano), esta vació pero bien acondicionado, hay dos recamaras, con sus baños completos y su sala, ahí estarían muy cómodos…



No…gracias…le dije…no me gustaría que de una u otra manera se dieran cuenta de nuestra relación, son muy maduros, pero no me gustaría, imagínate, tu la esposa de mi patrón, tarde o temprano, me oirían subir a tu recamara o que tu bajaras a la mía, ellos ya saben de tu esposo, mi patrón, no creo que sea lo correcto…



Tienes razón, pero ya te dije cuenta conmigo para lo que sea, consigue una casa que les guste y déjame hacerme amiga de ellos, ya el tiempo dirá…terminamos la cena y me dirigía a dejarla a su casa…



Quédate a dormir conmigo, esta noche, me dijo…



Sabes Yolanda, no me siento con ganas de tener sexo, discúlpame por favor…



No no quiero sexo…quiero que descanses quiero…papacharte y que te duermas a mi lado…vale?



Les hable por teléfono a mis muchachos para informarles que no llegaría a dormir…ellos solo me recomendaron que no tomara alcohol y que me cuidara, que ellos me querían mucho…



Así subimos a la recamara de ella, como no llevaba ropa de dormir, me acosté desnudo, ella hizo lo mismo, solo poniéndose una batita transparente y nos acostamos, fumando un cigarro que compartíamos…



Observando detenidamente su cuarto, me fije en ciertos detalles…



Yolanda…por que en el closet no hay ropa de tu marido o en el baño no hay productos de hombre…



Por que este es mi cuarto, el tiene el suyo, me contesto…



Pero se me hace extraño, bueno digo, siendo tu marido que cuando el viene duerman juntos…



Ella bajo la mirada…y me dijo…



Te voy a contar, la verdad de mi relación con Benjamín y te lo voy a decir por que se el hombre integro que eres, de mente abierta y lo suficientemente maduro para entender estas cosas…



Benjamín es gay…me soltó…



El humo del cigarro, se me atoro y tosí fuerte…perdón?...no chigues…como crees!



Si es maricon de ida y vuelta, bueno le gusta mas recibir que dar, para que me entiendas…



Yo con el estado de ánimo que andaba y con esta confesión, mi cabeza se revolvió mucho más…



Como así?...si se ve un hombrazo además bonito no es…



Mira el en su niñez halla en Michoacán, sufrió muchos abusos, sexuales la mayoría y eso lo marco para siempre, yo lo conocí, era ilegal, yo soy ciudadana americana, no siempre fui rica, aunque siempre he tenido caros gustos y trabajaba duramente para tenerlos, un buen día me lo presentaron y empezamos una relación amorosa, nos casamos, el arreglo sus papeles y como haz visto es un hombre muy capas para el trabajo, así que iniciamos esta compañía, al paso de los años me di cuenta, que se le iba la cochina al monte, como decimos en mi pueblo, en las fiestas solo se rodeaba de hombres, nunca le coqueteo o fue mas amable con alguna mujer y yo observaba que era demasiado cariñoso con sus empleados, los abrazaba y hasta les hacia una caricia, que yo creía bien intencionada hasta que un día en una fiesta en la casa en Wyoming, se me desapareció, lo empecé a buscar y lo encontré en una bodega que tenemos en la parte de atrás de la casa, empinado y uno de sus capataces se lo estaba culeando, como me conoces, me enfurecí, modestia aparte ya ves que clase de mujer soy yo, se lo que tengo y me sentí muy mal, y me retire a mi recamara, al día siguiente, el trataba de hablar conmigo, pero yo no salí de mi cuarto por varios días, solo bajaba a comer cuando el se iba a trabajar, pero cuando el estaba en casa yo me refugiaba en mi alcoba, hasta que como a la semana, el me espero escondido y yo creyendo que ya se había ido, salí, pero, el estaba ahí y rogándome que lo escuchara hablamos mucho y acordamos en seguir esta relación por conveniencia mutua.



Yo no salía de mi asombro…vivir para creer…pensaba



De ves en cuando…me seguía Yolanda diciendo…traía alguna persona, para que me cumpliera…pero a todos los impresionaba mi cuerpo y no podían, solo uno en un año, medio se le paro y ahí regularmente lo hicimos, pero no muy bien, en la casa de Wyoming tengo una gran colección de consoladores, de todas las marcas y tamaños que el me compraba y hasta a veces compartimos, por eso cuando la comadre Mica, me contó de ti, me emocioné mucho, así que convencí a Benja que te contratara, y ya ves, el esta muy contento con tu trabajo y yo encantada también, poniendo su mano sobre mi verga, que estaba mas dormida que la bella durmiente…



Que sorpresas te da la vida…solo alcance a comentar, le di un beso en la mejilla y me acurruque en posicion fetal, ella jalo las sabanas, se tapo y me abrazo quedando dormidos…



Todavía no amanecía, solo una pequeña luz desde el baño atenuaba la oscuridad, empecé a sentir unos labios que me mamaban con gran suavidad la punta de mi verga, solo alcance a distinguir, su cabellera rubia y su nalgatorio en pompa y así triste, triste como estaba yo, mi camote se empino al sentir la sabrosa mamada que me estaba pegando Yolanda…



Que camoton… papacito…como me gustas…srupp…sruppp…



Hizo un movimiento como de quererse subir, pero la detuve y la gire tumbándola en la cama, me incorpore, le abrí sus piernotas, le besaba sus delicados y finos pies así como su entrepierna, con mi mano, empecé a palpar su jugosa raja pelona y la empecé a desear, sacando y metiendo lentamente mis dedos de su encharcada vagina, ella tuvo varios orgasmos que se depositaron en mi mano y me los llevaba a mi boca, para saborarear de su sabor de hembra caliente…



Puse sus piernones al hombro, por costumbre quería buscar una almohada para ponerla en su trasero, pero, sus nalguisimas hacían ese trabajo, así que, solo le presente el cabezón abriendo los labios de su panocha y se la deje ir hasta que mis huevos rebotaron en sus nalgas…



Papitoteeeee…esto…estoooo…es lo que quiero…un macho que me sepa montar…aaahuuuuggg…sabrosa verga tienes amor…



La penetraba, con fuerza, como tratando de descargar toda las emociones vividas, el fin de semana…



Cabroooon…me lastimas…lo haces muy fuerte…me decía…



Yo entendí y sabia que no era correcto que me desquitara con ella de lo que a mi me pasaba, así que suavice mis movimientos de mete y saca…pero…



Ándale…sigue…desquita tu coraje conmigo…para eso estoy…soy tu mujer…tu puta…hazme lo que quieras y por donde quieras, hay pendeja de ella, cada quien su vida…cojéeme amooooor…



Impulsado por su palabras empecé un mete y saca violento, tomándola por los hombros, la jalaba hacia mi verga queriéndole meter hasta los huevos, la rinconeaba, cosa que a ella le fascinaba, sentía como se venia una y otra ves…



Papazoteee…que cogidota me estas dando…me estoy viniendo como loca, ya no voy a necesitar los piches consoladores…me vengoooo…. Auuughhhh…



Me empecé a venir tremendamente, claramente sentía mis chisguetazos de leche que le rebotaban en su útero y caí desplomado…



Que sabroso biscocho tienes mamita estas bien rica…



Así encima de ella deje que mi verga se saliera sola de su exquisito panochon, me recosté a un lado y seguimos durmiendo…



Cuando los primeros rayos de claridad se colaban por las persianas cerradas, me levante y me dirigí a la ducha, cuando sentí el agua caliente, recorriendo mi cuerpo, me espabile, ella entro desnuda a la ducha, tomo el jabón liquido en una esponja y empezó a restregar mi cuerpo, me enjabono todo, deteniéndose en mi verga, para lavarla mejor, orgullosamente se me volvió a parar, ella se volteo y poniéndose un poco de jabón liquido en las nalgas, se las abrió…



Enculame…mi rey…vuelve a probar mi culo…que es solo tuyo…mi hombre…mi machote…



Le endilgue de un empujón la cabeza…y espere unos segundos a que sus esfínteres se adaptaran al grosor de mi camote, ella reculo y se metió un poco mas de la mitad…



Que rica vergota…como me haces feliz Lalo…



La tome de sus hombros y le deje ir el resto del camote…



Aaaaaaayyyyy…ayyyyyy…como me llenas mi amor…



Le di unas serruchadas profundas y me vine bien rico en ese culote…



Cuando lo saque estaba todo embarrado de caca, ella se apeno y tomándolo con sus manos, me echaba agua de la ducha para limpiarlo, nos terminamos de asear y salimos ella se seco y se volvió a acostar…



Al estarme vistiendo para ir a trabajar…me dijo



Que chinga me metiste…tengo la sensación de tu pitote todavía dentro de mi…papito…



Me termine de vestir, le di un beso en sus labios sonrientes al ir saliendo, oí que me decía que en la tarde íbamos a ir a comer con mis hijos y que íbamos a ir d compras, que no me preocupara de nada, que fuera a trabajar tranquilo.



Así sali con la fresca mañana, volví a llenar mis pulmones de aire fresco y suspire…soy un hombre afortunado.



Nos vemos en el proximo.


Datos del Relato
  • Categoría: Maduras
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