Escribiendo un dictado de la propia boca de el mismo ministro de Gobernación sentados frente a su escritorio en su despacho encerrados, Yessenia que es hurgada y acariciada hasta tocada varias veces por la mano grande del ministro de Gobernación en todo su vagina mientras sigue escribiendo tranquilamente con unos ojos destapables como emocionadas emulentemente por lo bien que es tratada por el ministro de Gobernación en persona cada vez, que entra para tomarle dictado de su correspondencia y demás actividades gubernamentales.

Le pregunta el ministro voy muy rapido con el dictado si quiere voy más despacio entonces, le dice Yessenia para nada Señor Ministro estoy acostumbrada a la rapidez en la escritura para nada, me siento comoda y confortable en su compañía grata igualmente deleítosa, placentera, deseada, riqusima y sobre todo, sabe lo que me encanta y me pone a gozar palpar como lo esta presenciando ahora en mi compañía grata entre estas cuatro paredes que nos separa de la discreción de esa puerta para afuera entiende.