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Categoría: Maduras

La jefe de mi novia es mi zorra

LA JEFE DE MI NOVIA ES MI ZORRA



PRIMERA PARTE



 



El siguiente relato es el comienzo de una etapa de mi vida donde el sexo por fin alcanzo los niveles que siempre espere alcanzar. También significo la forma más placentera de ganarme la vida a través de lo que más me gusta: las mujeres.



 



Todo comenzó cuando mi vida sexual con mi actual novia se deterioro por culpa de los problemas laborales que ella tenía en ese entonces. Que paso de tener sexo todos los días en diferentes lugares y circunstancias a apenas una vez al mes siendo poco placentero y llevándome a pensar en la forma de ser infiel sin perderla pues la amo.



 



En una cena conocí a su jefe, una mujer solterona de 45 años de edad, alta, 1.75 de estatura, de cerca de 65 Kg. y una tetas enormes que se le veían muy bien gracias a la pequeña cintura que tiene para una mujer de su edad. Yo por mi parte tengo 28 años, mido 1.70 y peso 65kg. Tengo un cuerpo atlético pues practico pesas desde los 17 años de edad. A pesar de su buena apariencia es una mujer amargada que a través de los años a alejado a los hombres de su vida y hecho miserable la vida de todas las personas que trabajan con ella, que son y han sido siempre mujeres pues no soporta a los hombres.



 



Una noche mi novia me dijo llorando que ya no soporta más a su jefe y que pensaba renunciar lo cual no era bueno pues el desempleo es alto en nuestro país y realmente ella gana bien. Por lo cual tome la decisión de arreglar la situación aunque no sabia como lo haría. Yo solo sabia donde vivía esa mujer amargada pues en la fiesta que la conocí la llevamos a su casa y sin pensarlo más y estando seguro que mi novia no lo sabría en ese momento me dirigí a la casa de su jefa.



 



Ella me recibió sorprendida pues no recordaba quien era, pero al minuto lo recordó y me sonrió de forma hipócrita y sorprendida a la vez pues no sabía para que estaba yo allí. Le comente que mi novia no era feliz trabajando para ella debido a sus malos tratos y falta de respeto y ella me respondió que podía tratar a la gente como quisiera pues ella era la jefe y ella todo lo decidía.



 



Perdí la paciencia y le di tremenda cachetada mandándola al piso. Y cayo de tal forma que su falda se levanto dejándome ver sus medias negras de liguero y la tanga roja que llevaba puesta que se perdía en el culo más grande y apetecible que haya visto el cual pareció agrandarse mientras se levantaba estando a cuatro patas como una perra.



 



Yo me lance sobre ella para no dejarla levantar mientras mi verga palpitaba contra su culo y la tome de la cintura mientras ella me gritaba:



 



-Suélteme desgraciado, va a ver lo que le voy a hacer por esto.



 



Yo le conteste, lo único que va a hacer es chuparme la verga vieja amargada pues lo que le hace falta es una buena verga en su culo, en su vagina y boca para que se sienta como mujer y aprenda a respetarme.



Yo no quiero su verga pendejo sino que se largue de mi casa.



 



A lo cual yo respondí subiéndole el vestido hasta el cuello y arrancándoselo de un tirón. Quedando ella únicamente con la tanga roja, las medias de liguero, sus zapatos negros de tacón, brasier negro de encaje y un collar de perlas que hacían juego con unos aretes también de perlas y el cabello recogido.



Al no poder evitar la situación ella se excito de sobremanera, tal vez por mi o por la falta de una verga dentro de ella y me beso con odio, como cuando no se quiere admitir que se desea algo, me mordió los labios sacándome sangre a lo cual yo respondí con un mordisco en el cuello. Ella en seguida me saco mi camisa y camiseta, me abrió el pantalón y cogio mi verga durísimo con su mano a lo cual pude ver su mirada de morbo y lujuria. Le dije que era una perra y que me la comería como la perra estupida y odiosa que era. Y ella me contesto.



 



Si dame verga, mucha verga como una puta y seré tu puta pues ya no aguanto más las ganas de sentir esta verga enorme en mi culo. (aunque me considero normal, para mi novia y la jefe de mi novia mi verga es enorme según ellas, mide 20cm de largo aunque de grosor no sobrepasa el promedio).



 



La levante y la coloque en el sofá y me quite el resto de la ropa y sin pensarlo dos veces le levante las piernas y la abrí, hice a un lado su tanga roja para ver que la muy perra se depilaba completamente la vagina y el culo, como esperando desde hace cuando que un joven la desnudara sin piedad para luego comérsela. Con la punta de mi vergota le roce esa delicia de hembra mientras ella me gritaba desesperada, metemela ya hijueputa quiero que me metas toda esa vergota hasta el culo. A lo cual reaccione enojado y se la meti de un solo empujon a lo cual ella reaciono enterrandome las uñas en mi espalda y gritando del dolor.



 



Yo ignore el dolor que ella sentia y empece a meter y sacar mi verga con fuerza, sacandola toda hasta poder ver la punta de mi verga y metersela rapidamente hasta que se perdia completamente dentro de ella sintiendo que mis huesos se chocaban contra los de la pelvis de ella. También podia sentir como mi verga chocaba contra el fondo de su vagina que ya no podia dilatarse más y sentia como mi verga expandia a lo largo y ancho de la vagina de ella hasta el limite. El sonido de los fluidos de excitación de ella se mezclaban con los míos produciendo un ruido increíble.



 



Ella me gritaba que yo era un desgraciado con la vergota más rica del mundo, empezo a convulsionar anunciando un orgasmo increíblemente sonoro y al no poder más yo también llegue dentro de la vagina de esa mujer desgraciada, amargada y que realmente odiaba aunque debo admitir que queria darle verga desde el día que la conoci.



 



Le aprete con fuerza sus tetas y le dije que era la puta más buena del mundo mientras le soltaba chorro tras chorro de semen dentro de ella.



 



Al terminar me dijo que era un desgraciado por haberme aprovechado de ella y yo respondi volviendole a dar verga otras dos veces y viviendome dentro de ella dejandome seco.



 



Al final me beso con ternura y me confeso que había perdido la virginidad conmigo lo cual era cierto por la sangre que había en el lugar y también me dijo que por eso no planificaba y podría estar embarazada a pesar de tener 45 años.



 



Le prometi que no sería la última vez que le daria verga y que todo dependia de cómo tratara a mi novia que el día siguiente recibio un aumento y ascenso de su jefe que lucia radiante y feliz aunque en la oficina nadie sabe por que.



Esta historia continuara…..



Espero sus comentarios.


Datos del Relato
  • Categoría: Maduras
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