Busqueda Avanzada
Buscar en:
Título
Autor
Relato
Ordenar por:
Mas reciente
Menos reciente
Título
Categoría:
Relato
Categoría: Infidelidad

Una amiga me pregunto ¿porque sigo con mi marido si esta tan feo? esta

Hace unos días una amiga me pregunto que le veía a mi marido, pues yo soy una mujer de 32 años y modestia aparte, creo que me veo muy bien, al menos trato de no fallar en el ejercicio y no salgo si no me arreglo bien, la verdad es que no todas las amigas son tan sinceras y directas como mi amiga Elena, no es una pregunta que me hubiesen hecho antes aunque se que muchas de mis amigas lo piensan, pero no me atreví a darle la respuesta real, solo le dije que es un buen hombre, responsable, trabajador, buen marido y todo lo bueno que se les ocurra para justificar que yo vivo casada desde hace 8 años con un hombre que mide 1.64 cuando yo mido 1.68 sin tacones, que es gordito mientras yo no dejo mi yoga y el spinning, es calvo de la mitad de la cabeza y para colmo ni rico es.

 

La realidad es que antes de conocer a Nacho, yo tuve varias relaciones muy toxicas, llenas de celos e incluso golpes, que soportaba porque, o me gustaba mucho el chico, o aunque se escuche mal, porque tenían dinero, algunas veces las dos cosas juntas, de pronto llego un chico gordito y simpático que me pretendía y que no desistía aun cuando lo rechace varias veces, en la época en la que lo conocí yo tenia un novio con el que tenia saliendo mas o menos un año, era el clásico macho celoso y posesivo, se molestaba de como me vestía, de que hablara con amigos varones y hasta si me gustaba un artista de la tv, creo que por tener dinero sentía que yo era de su propiedad, y uno de tantos días que estaba deprimida, esa vez porque mi novio me había dado una cachetada por hablar con un amigo, llego Nacho a mi trabajo con una caja de chocolates, estaba en mi hora de comida y en lugar de ir a comer me desahogue con el y le conté lo que había pasado y como era mi relación con mi novio y como casi todos mis ex me habían tratado, la platica resulto tan abierta y tan agradable que Nacho me convenció de no regresar al trabajo para seguir platicando, para no hacer cansada la historia, solo les diré que termine por aceptar irme a un hotel con el, yo nunca había sido infiel a ninguno de mis novios y nunca había salido y mucho menos tenido sexo con un hombre tan feo como nacho, siempre había sido muy sangrona para aceptar a algún chico como pareja porque yo sabia que tenia buen cuerpo y que no era fea, mis amigas siempre me envidiaban los novios pero no sabían como eran realmente y con nacho fue diferente, de el solo me gusto su franqueza y que era amable, ninguna otra cosa hasta ese momento, ademas me agarro en un momento que estaba vulnerable y a lo mejor solo acepte irme con el al hotel por venganza a mi novio.

Lo increíble de todo es que una vez en el hotel, Nacho no fue nada tímido como a veces habían sido otros, el llego y sin ninguna pena se desnudo enseñando su panza por delante, me hizo cierta gracia pero no dije nada, si a caso pensé algo como, “¿Que estoy haciendo dios mio?”, pero también era amable sin dejar de ser directo conmigo, cuando me desnudo me dijo que era la mujer mas buena con la que había estado y que quería aprovechar cada minuto conmigo porque sabia que a lo mejor nunca tendría otra oportunidad así, eso me dio mucha ternura. Entonces comenzó la parte que yo pensé seria mas difícil para mi, cuando ya estaba acostada y Nacho se me acerco para besarme, yo cerré los ojos no para disfrutarlo, mas bien pensé que a lo mejor tendría mal aliento o que seria desagradable sentir su boca y su cuerpo gordo cerca de mi, para mi sorpresa no fue ni lo uno ni lo otro, su aliento olía bien, sus besos fueron suaves al inicio, y su cuerpo… hummm, ese si no me gusto mucho, nunca había tenido un novio gordo, pero la realidad fue que entre mas me besaba Nacho y con sus caricias suaves en mi cara, mi cuello y mis tetas me fue poniendo cachonda y su cuerpo dejo de importarme, cuando recién se había desnudado, yo había visto su verga no tan erecta, no me pareció gran cosa, pero ya entrando un poco en calor, su verga se puso dura y al sentirla rosando mi cuerpo me di cuenta que era de muuyyy buen tamaño, no era la mas grande que me había tocado pero si que era gorda (como el), en esos momentos no pensé nada, solo me percate que al menos no era como decían algunas amigas, que los gordos siempre la tienen chiquita, tampoco es que me importara tanto, solo quiero describir cada cosa que esa primera vez sentí o pensé.

Al principio Nacho se puso sobre mi, sentía que me ahogaba con su peso, ademas me abría demasiado las piernas, pero no dije nada por no hacerlo sentir mal, su verga ya me estaba entrando y honestamente me estaba gustando, aunque hasta ese momento no era nada especial, simplemente no me estaba resultando tan desagradable como yo pensé que sería, pero si estaba incomoda físicamente, la cosa cambio cuando me pidió que me pusiera de perrito, siempre fue una posición que me gusta mucho, Nacho se puso atrás de mi y comenzó a cogerme con fuerza, yo me fui excitando cada vez mas, de pronto sentí un jalón de pelo muy fuerte, nunca me había gustado que me jalaran el pelo, menos al coger, algunos de mis ex novios lo hacían y me enojaba mucho, Nacho había sido tierno y me dio un poco de lastima darme cuenta que seria como los otros, le dije que no lo hiciera y no me hizo caso, siguió jalandome el pelo mientras me cogía, por alguna razón que aun no entiendo, mientras con otros hombres que si me eran atractivos no me gustaba, con Nacho, me comenzó a gustar y me comencé a excitar aun mas, yo no me había dado cuenta que Nacho estaba de pie (bueno en cuclillas) cogiéndome mientras yo seguía de perrito, cuando me di cuenta por un instante se me hizo chistoso verlo así, pero fue solo un instante porque en realidad me estaba poniendo una cogida que me tenia bien cachonda y ni siquiera que me jalara el cabello me bajaba lo caliente. Poco después me volvió a acostar boca arriba pero esa vez ya no me molesto su peso, al contrario, se dejaba caer con fuerza mientras tenia mis piernas en sus hombros y sentía que me atravesaba, en serio sentía que la punta de su verga chocaba con el fondo de mi vagina y yo pedía que no se detuviera, quería seguir sintiendo eso tan rico.

Con todo y lo sabroso que estaba sintiendo, no fue eso lo que mas me gusto, Nacho apenas estaba comenzando conmigo, yo nunca fui ni puta, ni tan cachonda, creo que era una chica un poco creída y sangrona, no me gustaban las cosas vulgares, ni siquiera usaba palabras como las que estoy escribiendo, pero desde esa primera vez que me cogió Nacho, me di cuenta que el me hacia sentir cosas diferentes y no era solo la cogida, había algo mas que no entendía pero me gustaba. Nacho me estuvo cogiendo bastante tiempo, yo siempre tardo mucho para venirme y con el ya me había venido mientras me cogía de perrito y el seguía igual de intenso, estaba sudando muchisimo, le escurría el sudor por la cara y bajaba por la panza hasta que caía sobre mi estomago y algunas gotas caían sobre mi cara, incluso la parte de su calva se veían las gotas de sudor, nunca me había gustado que sudaran pero estaba tan cachonda que ni me importo, cuando por fin después de un largo rato me dijo que estaba por venirse a mi ya me dolía la unión de mis muslos con mi cadera de soportar su peso, Nacho saco su verga de mi pepa, soltó unos chorros de mecos tan fuerte que cayeron en mi pecho y en mi cara, se sacudió la verga un poco y me la volvió a meter para seguirme cogiendo, le dije que ya no aguantaba estar en esa posición y me dijo que me montara sobre el, apenas lo hice y se acomodo de forma que mis tetas le quedaban en su cara, supongo que por lo chaparro nunca le ha costado mucho trabajo, se aferro a mis dos tetas y me las comenzó a chupar como si fuera un bebe hambriento, no me lastimaba como algunos lo habían hecho algunas veces, el succionaba lo justo para hacerme sentir rico y sin dolor, con sus dos manos apretaba la teta que me estuviera chupando pero sin lastimarme y mientras yo sola me movía sobre el, ponía mis dos manos sobre su panza porque me servia para no irme de frente y nuevamente me vine tan rico que no quería que eso terminara, pero Nacho siguió y siguió mucho mas tiempo cogiéndome, hasta que por fin se vino una segunda vez y me dejo descansar, estaba impactada por el aguante de nacho y hasta la fecha es igual de aguantador.

Pero lo que mas me gusto fue que mientras todo lo anterior pasaba, Nacho me decía cosas que para mi eran bonitas, no paraba de decir lo mucho que le gustaba y lo hermosa que era, por momentos cuando estaba mas cachondo me decía que si fuera su mujer, me dejaría ser tan libre como quisiera, que nunca me pondría una mano encima, que me dejaría vestirme como quisiera, que si yo quería tener mas novios, el me cuidaría de que no me trataran mal, que yo seria su diosa, su adoración, todo eso no era realmente romántico pero sonaba honesto, no me parecía que fuera como otros que te dicen miles de cosas con tal de cogerte y a la mera hora son unos hijos de la chingada contigo y me lo confirmo cuando estábamos descansando, me decía que era verdad, que el no era ningún macho, que si fuéramos algo mas, y yo tenia ganas de estar con otro, que lo hiciera, que disfrutara de mi vida y que el siempre estaría esperándome y cuidándome, nunca un hombre me había dicho eso, como dije, no era romántico pero si muy honesto.

Pasaron como dos meses donde yo seguí con mi relación con mi novio y Nacho seguía igual de lindo, en ese tiempo no repetimos lo de la cogida que me había dado, yo no quería confundirme, ni ser infiel, pues me había gustado estar con el pero físicamente no era mi tipo, cuando termine con mi novio, acepte ser su novia, Nacho estaba feliz, me llenaba de atenciones y regalos, se gastaba lo poco que ganaba en mi, me cuidaba, nunca me hizo un pancho por nada, podía vestirme un poco mas sexy, me podía encontrar platicando con amigos y no se molestaba aunque yo lo ocultaba de todos mis conocidos, nunca les dije que era su novia, para todos solo era mi amigo y no dejaba que me abrazara y menos que me besara frente a nadie, nunca había sido infiel pero dos veces me hice novia de diferentes amigos por solo un par de semanas con cada uno, solo para demostrarles a los demás que Nacho no era nada mio, incluso algunas veces yo iba con la otra persona y Nacho me veía y hasta me saludaba, pero nunca me demostró molestia o celos, al contrario, era muy comprensivo y sabia porque yo hacia lo que hacia, el me demostraba su amor de una forma muy diferente a cualquier otro hombre que hubiera conocido, paso mas de un año desde que acepte ser novia de Nacho para que nos comenzaran a ver abrazados y algunas personas supieran que eramos novios, me comenzaron a llover criticas de mis amigas por salir con el, pero la realidad yo ya estaba enamorada de Nacho.

Puedo decir muchas cosas para justificarme, pero nada seria verdad, me daba pena ser la novia de Nacho aunque me encantaba coger con el, ningún hombre me hacia liberarme tanto como nacho, ninguno me había excitado tanto al cogerme como Nacho, hasta me fui acostumbrando a su forma de ser, a su forma de cogerme, a lo que le gustaba y comencé a aceptar hacer cosas que con nadie mas había aceptado, Nacho es un hombre ardiente y con muchas fantasías que no se guarda, yo disfrutaba y sigo disfrutando hacerlas realidad, era como si el supiera cuando y como pedirme las cosas para que aceptara, pero hasta en la forma de hablar, me pedía que yo le pidiera verga, que le pidiera que me cogiera y me gustaba hacerlo, lo que me costo mas trabajo fue platicarle sobre las breves relaciones que tuve con los otros dos chicos, me daba pena y pensaba que podía lastimarlo, después me di cuenta que el se excitaba y era muy raro para mi que un hombre y mas estando feo, le gustara saber que su novia se había acostado con alguien mas, ahora con 8 años de casados entiendo cada cosa que me decía y hacia, me enseño a disfrutar con el o sin el, no es que me haya vuelto una puta, pero si algún hombre me gusta, tengo la confianza de decirle a Nacho y me anima a pasarla bien, me hace sentir libre y a la vez atada a su amor. Ya no me da pena que me vean con el, puede que sea feo pero cuando a veces algún hombre con el que me voy a coger, me dice, “¿porque sigues con tu marido?” o “déjalo y te vienes conmigo” o cualquier cosa tratando de que lo deje o que los prefiera a ellos, lo primero que les digo es que Nacho es mas hombre que cualquiera de ellos y la mayoría se quedan callados, pero si siguen insistiendo he llegado a decirles “cuando tu me hagas gozar y sentir como lo hace el, entonces me voy contigo”.

Pues esa es la verdadera razón por la que sigo y seguiré con mi esposo, aunque todo mundo diga que esta feo, a mi me da orgullo salir muy arreglada a la calle y verme sexy junto a mi chaparro, porque muchos hombres no pueden evitar voltear a verme y hasta puedo imaginar lo que piensan de el, pero cuando en verdad acepto irme con alguno, lo que no saben es que si voy a coger con ellos es porque ese chaparro, gordo y calvo que menos precian, es el que me da el permiso porque esta seguro de lo que tiene y de lo que me da para que siga enamorada y nunca lo deje.

Datos del Relato
  • Categoría: Infidelidad
  • Media: 0
  • Votos: 0
  • Envios: 0
  • Lecturas: 1255
  • Valoración:
  •  
Comentarios


Al añadir datos, entiendes y Aceptas las Condiciones de uso del Web y la Política de Privacidad para el uso del Web. Tu Ip es : 52.14.85.76

0 comentarios. Página 1 de 0
Tu cuenta
Boletin
Estadísticas
»Total Relatos: 37.842
»Autores Activos: 2.203
»Total Comentarios: 11.826
»Total Votos: 511.803
»Total Envios 21.937
»Total Lecturas 93.975.994