Yo vivo sola y hace poco descubri mi lesbianismo que me tiene excitada todo el tiempo y dificilmente pienso en hombres,.... pero en perros, muchas veces.
Vivi con mi pareja hombre durante algunos años durante los cuales mis relaciones sexuales con él eran fabulosas.
Antes, cuando vivia con mis papas teniamos una perrita a la que le enseñe a que me lammiera mi cosita. Era un french.
Descubri tarde mi sexualidad, a los 19 años, pero desde que me masturbe por primera vez me hice viciosa de mi clitoris.
Pronto descubri que si ponia mermelada en mi vagina la wipi me lammia hasta hacerme venir en tremendos orgasmos.
Cuando andaba mas caliente que de costumbre iba a al refrigerador por un frasco de mermelada y me lo llevaba a mi recamara a esperar el momento oportuno de llamar a mi perrita y me hiciera el trabajo.
Despues que me separe de mi pareja mi perra ya no existia y despues de un tiempo mi hermana me regalo un perro labrador color miel, lo hizo un poco para que lo compartiera con su hija.
Cuando era cachorro notaba que algunas veces le salia la puntita de su verga lo cual a mi me calentaba. No tarde en empezarle a sobar los huevos y a provocar que se le parara su roja verga la cual seguia sobando un rato.
Cuando ya tenia el perro un poco mas de un año un dia que sabia nadie vendria a casa y estando particularmente caliente me bañe, me rasure -me fascina verme rasurada porque tengo un clitoris gigantezco y me enloquece vermelo paradito- me puse crema en todo el cuerpo, me perfume y me vesti solo con una camiseta de tirantes de esas que usan los basquetbolistas, sin nada abajo.
Sali del baño con mi atuendo y encendi la computadora para entrar a ver sitios de relatos a los que soy aficionada.
Vi lesbianas besandose y comiendose los coños, lei sobre incesto y lesbianismo y cai en zoofilia.
Ya estaba muy caliente y oliendo ese vaporcillo que salia de mi puchita mojada, separe mis piernas y pase mi mano por mi rajadita sintiendo como mi mano quedaba mojada llevandomela a mi boca para chuparme los dedos.
No aguante mas y me fui a mi cama a masturbarme, me acoste, doble las piernas y separe los pies para empezar a acariciar mi clitoris ya erecto,...pero; ¡me acorde del perro!
Le llame y vino de inmediato moviendo su cola, lo subi a la cama y le empece a sobar los huevos y no tardo en aparece la puntita roja de su verga, como saludandome.
Segui estimulandolo y pronto le habia salido buena parte de su verga. Estaba el perro acostado con las patas abiertas, me quite la camiseta y me acoste a un lado de él poniendo mi cara muy cerca de su verga sin dejar de mirar esa cosa que cada vez se ponia mas grande.
Con una mano le acariciaba su cosota y con la otra me metia la mano por entre mis nalgas.
No pude resistir mas y me le fui directo a su vergota roja llena de venitas para metermela en mi boca y empezar a chuparsela, gemia un poco y yo seguia calentandome mas en cada sacada y metida de verga en mi boca.
Mientra con una mano le sostenia su verga para chuparsela mejor con la otra me metia los dedos en mi puchita provocandome un placer que no habia imaginado ni aun cuando habia estado con mi hermana y unas amigas.
Me puse tan caliente que lo levante y me puse abajo de el tomandole su verga e introduciendola en mi pucha bien abierta y mojada. Me la enterro de un solo golpe y yo lo agarre del lomo y empece a moverme como loca diciendole; "¡... MAS,...MAS,...METEMELA TODA,...MAS,...MAS!"
Como si me entendiera.
Empezo a gemir mas y mas hasta hacer un ruido que a mi me parecio que decia ;Voooooooyyyyy......vooooooooyyyyyy, era un aullido muy extraño.
Me vine en un orgasmo fenomenal.
Ahora me gustaria convencer a mi hermana para que lo integremos a nuestras sesiones lesbicas