Reunida en una cena con un importante cliente oriental visto y luzco para la ocasión un traje chino color rojo con sus bordados y diseños que ante ustedes les digo que conservando mí figura corporal y de perfil ajustandose, entallandose, modelandose y por supuesto ceñido a mí cuerpo de bella mujer de 35 años con ligas red megra en botas plataforma látex negro que cómo siempre no hablo el idioma oriental en que me acompaña y asiste conmigo mí hijo adolescente de 16 años el que actua directamente cómo traductor entre el cliente chino y yo.

Yo le converso de las negociaciones cómo de los beneficios que obtendremos ambos con la fusión y sobre todo alianza entre nuestras coorporaciones hoy por hoy que representamos ambos entendiendonos a las mil maravillas entre él cliente chino y yo a través de la intermediación asimismo traductor de mí hijo tanto de español a chino y viceversa de chino a español simultaneamente para ambos.

En que brindamos y tomamos sake sentados en cojines yo con mis rodillas dobladas y piernas debajo de mí en que debajo de la mesa este cliente chino anda un poco hebrio natural y cautivadisimo, seducidisimo, provocadisimo, deleitadisimo, deseadisimo, hambrientisimo, apetitosisimo, gozadisimo, calientisimo, buenisimo, asimismo enajenadisimo, aventuradisimo, también riquisimo y por supuesto sabrosisimo, hasta loquisimo por mí en que con una mano me acaricia y soba hasta rosa mi regazo y entrepierna que me dice hilarante cómo gocosa además embriantemente que me ve sexy con el traje de mujer china en que está apasionado, cautivado, seducido, provocado, incitado, fascinado y sobre todo efectivamente emocionado por mí que quiere hacerme el sexo al acostarse conmigo y solamente conmigo sintiendome muy halagada y al mismo tiempo incomodisima pero verdaderamente excitada por este.

Consensuadamente le dejo aproximarse al abrazarme y besuquearme todo lo que quiera y acostarme ahí mismo en que se las ingenia logrando correrme el traje al quitarme el mismo hilo dental con tal prueza ante mis propias narices y ojos al follarme profunda con todas sus fuerzas, ánimos, alientos, impetus cómo hartisimas ganas contenidas hasta desbordantes hacia mí por parte del cliente chino en presencia de mí hijo adolescente de 16 años que me hace la tradución al español de lo que me dice el cliente chino.

Volteada y en cuatro me coge al enterrarme su pinga gigantesca, dura, enorme asimismo paradita en mi culo que me lleva y empuja tanto hacia delante cómo atrás continua y viceversamente a mí que soy hoy por hoy la madre y puta de 35 años que tiene relaciones incestuosas cómo amorosas hassta apasionadas finalmente aventuradas con mí hijo adolescente de 16 años y con sus amigos también con otros hombres invitados, traidos, concertados, finalmente publicitando por mí hijo adolescente de 16 años en persona cómo en vivo y a todo color.

Bueno ahora este cliente chino se acuesta al levantarme sus entrepiernas en forma de silla donde me siento yo al dejarme penetrarme por debajo de la vagina en donde yo me restriego cómo sobo hasta roso y para variar follarme por la pinga en todo el asiento en sentido figurado colmadisima soltando prendada bastantes jadeos, gemidos y sobre todo emocionantes suspiros bañadisima y traspiradisima de sudor continua y parejamente desde mi cabeza hasta mis pies al tener a mí hijo adolescente mamandome y chupandome hasta devorandome de mis pezones y senos entre tanto hurgandome en mi vagina que tengo al mismo tiempo como asiento al cliente chino que me folla debajo de la misma vagina y mucho más entre mi hijo adolescente de 16 años con el cliente chino en el comedor reservado del restaurante chino donde fuimos a cenar y cerrar las negociaciones para nuestras dos coorporaciones hoy por hoy y mucho más para los tres juntos y asolas.